Juegos olímpicos de Tokio 2020 se celebrarán en el verano del 2021
Agencia de Noticias UPB – Medellín. El primer ministro de Japón, Abe Shinzo, y el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, tuvieron una reunión en la que han acordado el aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio. La cita se celebrará el 23 de julio al 8 de agosto del 2021.
La decisión se tomó finalmente para salvaguardar la salud de los atletas, todos los involucrados en los Juegos Olímpicos y la comunidad internacional, luego de que el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró que la pandemia del COVID-19 se está "acelerando" y los casos registrados en todo el mundo crecen cada hora.
Solo las dos Guerras Mundiales habían podido derrotar a los Juegos Olímpicos, impidiendo su normal desarrollo y obligando a los organizadores a tomar una drástica decisión, hoy se posponen las justas nuevamente debido a la pandemia del COVID-19, emergencia de salud pública internacional.
Historia olímpica
Los Juegos Olímpicos tienen dos periodos históricos, el antiguo, en el siglo VII a. C., organizados en la antigua Grecia con sede en la cuidad de Olimpia, un periodo de convivencia de pueblos guerreros. Cada 4 años hacían la paz para participar en juegos de tipo olímpico, que es el mismo concepto de hoy, juegos en paz, la juventud integrada y los pueblos intercambiando culturas.
Otro de los periodos es el moderno, a partir de finales del siglo XIX, tienen la misma esencia y se han ido convirtiendo en un momento cada 4 años, en el que cada Estado aprovecha los Juegos Olímpicos como una plataforma para mostrar sus atletas y además de eso sus logros, desarrollos, la capacidad cultural y social que puedan tener. “Cuando se toma la medallería efectivamente ahí vemos a las potencias siempre liderando y si miramos quiénes son los organizadores y sede de los encuentros generalmente encontramos a las potencias”, comentó Ramón Maya, decano de la Escuela de Ciencias Sociales de la UPB y docente de geopolítica.
Así mismo, indicó Ramón que los Juegos Olímpicos tienen una dimensión muy interesante y es que los Estados ponen allí su capacidad de organizarse desde el punto de vista cultural y deportivo para que la juventud tenga campeones. Es estratégico que cada gobierno destine partidas importantes para la preparación de deportista de alto rendimiento y así llevar en nombre del país medallas de oro que hagan sentir a la gente orgullosa de su gobierno y de su Estado, implicaciones psicológicas y sociológicas muy importantes en este ámbito.
El aplazamiento de los juegos olímpicos trae consigo muchas implicaciones, una de ellas es la de carácter económico e infraestructura. “Estas justas olímpicas conllevan gastos grandes en la preparación, montaje, construcción y arquitectura de lo urbano. Hoy se han desnaturalizado mucho el fundamento o el principio de los Juegos Olímpicos desde sus orígenes, hoy se privilegia más el aspecto económico, político y religioso. Estas olimpíadas se han convertido en una plataforma publicitaria y de marketing deportivo”, indicó Juan Carlos Rodas, director de la editorial UPB.
Así mismo, indica Maya que no es conveniente realizar un evento de esa magnitud en un momento de contingencia tan complejo, donde la asistencia de deportistas, periodistas y turistas mermaría en gran cantidad por la cuarentena a la que se enfrenta el mundo actualmente.
"Este aplazamiento va a significar para muchos deportistas una oportunidad perdida de participar en los encuentros, sobre todo para esos que ya están muy avanzados en edad y veía en Tokio su última oportunidad de lograr medallas”, aseguró el decano Maya.
La posibilidad de que los Juegos Olímpicos fueran aplazados era una petición que los diferentes países venían manifestando frente al COI, ya que muchos no se encontraban en condiciones de asistir, debido a las diferentes circunstancias que ha conllevado la pandemia del COVID-19.
“No hay duda de que Japón estaba preparado desde hace muchos años para hacer unos juegos olímpicos espectaculares y mostrarle al mundo la clase de potencia que es, potencia económica, comercial, industrial y científica. Luego de que esta emergencia de salud pública termine, será la oportunidad para el COI de mostrar que no murieron los Juegos Olímpicos, que siguen vivos, y los van a realizar mejor que en cualquier otra parte del mundo”, agregó Ramón Maya.
Finalmente, el decano Maya comentó que cuando toda esta contingencia termine, la gente va estar tan feliz y van a ver tantas posibilidades de celebrar que indudablemente las olimpiadas van a ser una oportunidad de hacer una fiesta mundial muy bella, muy grande y muy poderosa.
Por Estefanía Hernández Cavadía, Agencia de Noticias UPB - Medellín.
