Agencia de Noticias UPB - Medellín. En el marco de la muestra de trabajos finales de los programas de la Universidad Pontificia Bolivariana, estudiantes de la Facultad de Ingeniería Aeronáutica articulan sus conocimientos con el propósito de diseñar aeronaves en modalidad virtual.
El curso de Diseño de Aeronaves está dividido en Diseño I y Diseño II. Estos, tienen como objetivo que los estudiantes apliquen el conocimiento adquirido en las materias de su ciclo profesional, en un proyecto real en donde deben integrar las diversas áreas y conocimientos que han visto durante la carrera.
“Ya no se está hablando por un lado de los motores y por el otro de las alas, como lo han hecho en sus cursos de propulsión y de aerodinámica, sino que tienen que tratar todos los aspectos del diseño de una aeronave. Lo más interesante es que por primera vez, ellos ven cómo están de interconectados todos estos elementos y pueden también expresar su creatividad e ideas en un proyecto”, mencionó Jorge Elías Montoya Vélez, docente de la Facultad de Ingeniería Aeronáutica.
En Diseño I, los estudiantes diseñaron una aeronave de apoyo a las tropas en tierra que cumple una misión conocida como CAS (soporte aéreo cercano). Según Jorge Elías, es un tipo de aeronave militar de la cual hace muchos años no se han desarrollado nuevos modelos, lo que permitió que los estudiantes tuvieran oportunidades de mejora con un diseño novedoso y creativo.
El proyecto final de los estudiantes de Diseño II fue el diseño completo de una aeronave para transportar 400 pasajeros en total, pero con una distancia corta comparada con otros aviones de esta capacidad de pasajeros.
Algunos de los diseños de los estudiantes fueron:
“El proyecto consiste en el diseño de una aeronave militar, que se desempeña como apoyo aéreo a las tropas en tierra, reemplazando la aeronave A-10 de la USAF. Esta aeronave cuenta con capacidad para alcanzar velocidad supersónica durante su vuelo, destacándose por la rapidez para asistir a sus aliados y además está dotada de toda la tecnología para comportarse con una aeronave furtiva”, indicó Manuela Montoya.
“Nuestro grupo se planteó el reto de diseñar una aeronave muy funcional, estética y moderna. Surgió el diseño del NM 115 Eagle, una aeronave moderna tripulada remotamente hecha para el combate, capaz de volar en condiciones extremas y volar a velocidades supersónicas, pero sobre todo hecha para apoyar las tropas en tierra y cuidar las vidas de aquellos soldados que se arriesgan por una nación”, explicó Michael Bustos.
Según Esteban Morales Aguirre, "el día de hoy existen nuevos obstáculos, retos y amenazas que ponen en riesgo el futuro de millones de personas. Para responder ante estos requerimientos, se necesitará un sistema que no lo detecten los radares, que pueda realizar operaciones limpias y precisas llegando a velocidades de hasta más de 1000km/h y que no arriesgue la vida de sus operadores, mientras cuida a los soldados y civiles en riesgo. La solución es el sistema A-20 Silent Dragon o Dragón Silencioso, un dron furtivo que permitirá realizar misiones de apoyo terrestre usando una combinación variada de armas para limpiar zonas de grupos extremistas que amenazan soldados y comunidades enteras".
Es un desarrollo innovador donde por medio del uso de tecnologías UAV (unmanned aerial vehicle) o vehículo aéreo no tripulado, se estipulan temas futuristas en el diseño, tales como: versatilidad, velocidad y ataque aéreo. “Recalcando estas habilidades se encuentra el objetivo específico, en mi caso, la velocidad. Haifisch significa tiburón en alemán, uno de los animales más rápidos del agua, por lo cual se podría decir que esta aeronave es el tiburón de los cielos”, indicó Mateo Duarte García.
Es una aeronave categoría transporte que puede realizar misiones de hasta un poco más de 6400 km, con cerca de 42 toneladas de carga. Tiene la capacidad de albergar 400 pasajeros divididos en 2 clases, económica (350) y ejecutiva (50). “Este avión no posee ventanas, ya que fueron sustituidas por un sistema de entretenimiento a bordo capacitado con pantallas de última tecnología y un conjunto de cámaras posicionadas estratégicamente para visualizar todo el entorno exterior durante el vuelo. También, posee unidades de desinfección de aire y agua basada en tecnología LED UVC que la convierten en una excelente aeronave para enfrentar las posibles condiciones del sector aeronáutico post-coronavirus”, explicó Juan Pablo Gómez.
Finalmente, Jorge Elías Montoya Vélez concluye: “Para los estudiantes fue un reto el trabajo en equipo (que es uno de los objetivos del curso) de forma virtual. Muchas veces es más fácil tomar decisiones y tener discusiones de forma presencial, pero creo que todos nos hemos ido acostumbrando a este trabajo. Afortunadamente los estudiantes de ambos cursos pudieron hacer unos excelentes trabajos a pesar de las dificultades técnicas, logísticas y de organización que representó el cambio a la modalidad virtual”.
Por María Fernanda Arrubla López, Agencia de Noticias UPB - Medellín.
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